La comida procesada se refiere a alimentos que han sido alterados de alguna manera a través del procesamiento, como la congelación, el envasado o la adición de conservantes. La comida ultraprocesada, por otro lado, es una categoría más específica de comida procesada que ha sido sometida a un mayor nivel de procesamiento y contiene una variedad de ingredientes artificiales y aditivos.
Los alimentos ultraprocesados suelen ser ricos en azúcares, grasas y sal, y pueden contener una variedad de sustancias artificiales como conservantes, colorantes y sabores. También suelen ser bajos en nutrientes esenciales como vitaminas, minerales y fibra. La OMS recomienda limitar el consumo de alimentos ultraprocesados ya que se ha relacionado con un mayor riesgo de obesidad, enfermedades cardíacas y diabetes. Por el contrario, se recomienda una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y lácteos bajos en grasa.
Ejemplos de comida procesada incluyen:
-Alimentos congelados, como las verduras congeladas, ensaladas envadas, leche de vaca o vegetal, yogures, cereales.
-Envasados, como las latas de atún o las conservas de frutas y verduras.
-Alimentos precocidos, como los macarrones precocidos o las patatas fritas.
-Alimentos con conservantes, como los embutidos o los productos ahumados.
Ejemplos de comida ultraprocesada incluyen:
-Alimentos precocidos con muchos aditivos, como comidas rápidas envasadas, las comidas congeladas con salsas añadidas, las pizzas precocidas, los snacks y los alimentos precocidos con muchos aditivos.
-Alimentos con azúcares añadidos, como los cereales azucarados, los pasteles y los dulces.
-Bebidas azucaradas, como los refrescos y los jugos.
-Alimentos con grasas hidrogenadas, como las galletas, los pastelitos y las patatas fritas.
-Alimentos con saborizantes artificiales, como los snacks, los dulces y los embutidos.
Es importante notar que la diferencia entre comida procesada y ultraprocesada no está en el procesamiento en sí, sino en los ingredientes y aditivos utilizados en su elaboración. Los alimentos procesados pueden ser beneficiosos si se consumen en moderación, mientras que los ultraprocesados
son menos saludables debido a la cantidad y calidad de ingredientes añadidos.
Por ejemplo los productos Real Vegy, a pesar de ser un alimento procesado, son muy saludables, con una tabla nutricional muy equilibrada en cuanto a grasas, fibra, azucares y proteínas.
Por este motivo desde RealVegy siempre insistiremos en la importancia de leer las etiquetas de los productos que consumimos. A veces nos dejamos llevar por los reclamos que vemos en el etiquetado y no nos paramos a leer con detalle los ingredientes y los valores nutricionales. Por supuesto si en un producto nos están haciendo un reclamo en grande “con aceite de oliva”, seguro que es cierto, sin embargo que hay del resto de los ingredientes y del valor nutricional del conjunto del producto.
Ejemplo de valores nutricionales de comida procesada y ultraprocesada La información nutricional de un alimento procesado puede variar dependiendo del producto en cuestión, pero en general, suelen contener niveles moderados de nutrientes esenciales como proteínas, carbohidratos y grasas. Por ejemplo, una lata de atún contiene proteínas magras, una pequeña cantidad de grasa y carbohidratos, y es rica en vitaminas y minerales como el hierro y el calcio.
Por otro lado, los alimentos ultraprocesados suelen tener una nutrición desequilibrada, con un alto contenido de azúcares, grasas y sodio, y un bajo contenido de nutrientes esenciales. Por ejemplo, un paquete de galletas con sabor a vainilla tiene un alto contenido de azúcar, grasas hidrogenadas y sodio y
un bajo contenido de fibra, vitaminas y minerales. Una lata de refresco tiene un alto contenido de azúcares añadidos y un bajo contenido de nutrientes.
En resumen, los alimentos procesados tienen una nutrición desequilibrada, mientras que los ultraprocesados tienen una nutrición más desequilibrada.
Otra vez te insistimos es importante leer las etiquetas nutricionales y elegir alimentos con una nutrición equilibrada, evitando los alimentos con un alto contenido de azúcares, grasas y sodio y poco nutrientes esenciales.
